10 de agosto de 2013

MIENTRAS SUENA QUIQUE GONZÁLEZ




Llévame a ver salir el sol
desde todos los portales de la luna
llévame al puerto y al malecón
cuando el cielo se nos llene de gaviotas
Quique González

Llévame a ver salir el sol,
a ver como baña tu piel
de luna llena,
a empaparme con el brillo
de tus ojos,
a estrellarme en su color
de tierra firme.
Llévame a aquella playa
de arena blanca y aguas
claras como tu sonrisa
a nadar en tu interior
como quien encuentra
un rompeolas
para aferrarse a la vida.
Quiero regresar contigo
a aquellos días
en los que nos despertaban
las primeras luces del alba
y yo desayunaba
del rojo intenso de tus labios,
cuando me mantenían vivo
los hilos negros de tu pelo.
Y si nada de esto
fuera posible
deja que me pierda para siempre,
prefiero mil veces
el olvido de la gente
a la desmemoria
de nuestra vida juntos.
Llévame a ver salir el sol,
a bailar bajo la lluvia
mientras suena Quique González,
hagamos nuestra
la fiesta de la luna llena.
Yo prometo seguir vivo
si tú me recuerdas
como aquellos días.
Lejos de eso
todo es muerte y abandono,
fuera de ese pasado presente
no somos más que dos
seres analógicos
en la era digital...
Llévame a ver salir el sol
y no me sueltes,
no sea que algún rayo
de luz
enturbie mi sueño
y despierte en una cama
demasiado grande para mí,
demasiado fría
sin tu cuerpo.

2 comentarios:

  1. Melancólico y tristón. Pero muy genial. Digno de muchas expectativas en la cama playera... Yoy know.

    Ben fet! Bes.
    M.

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  2. Es un poema brutal aunque se respire melancolía.
    Y la mezcla de tus versos con Quique es caer en un bucle precioso y en un precipicio al mismo tiempo.

    Que me encanta ya a estas alturas es poco.

    Un abrazo, César. :)

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