18 de septiembre de 2012

ADIÓS ESPERANZA


 
Me dicen que la Esperanza

es el motor que mueve el mundo,

me dicen que es lo último que se pierde,

que hay que confiar en que nos llegará

lo prometido.

Oigo por ahí que la gente diestra

deposita su fe y sus deseos en ella…

 

Hoy hemos perdido la Esperanza,

pero hemos ganado a cambio

la Paz y la Alegría.

Hoy hemos perdido la Esperanza

y sentimos un renacer en nosotros,

un motivo para soñar despiertos

y libres de todo mal.

 

Aquellos mentirosos que dijeron

que era bueno conservarla,

que se vayan al infierno con ella

y no vuelvan.

4 de septiembre de 2012

OTOÑO


Aprovechemos el otoño
antes de que el futuro se congele
y no haya sitio para la belleza
porque el futuro se nos vuelve escarcha

Mario Benedetti

 

En llamas, en otoños incendiados,
arde a veces mi corazón,
puro y solo.

Octavio Paz

 

El otoño se acerca con muy poco ruido:
apagadas cigarras, unos grillos apenas,
defienden el reducto
de un verano obstinado en perpetuarse,
cuya suntuosa cola aún brilla hacia el oeste.

Ángel González

 

Volveré a sonreír cuando mire por la ventana

y vea las hojas ocres de los árboles

perseguirse arrastradas por el viento.

Volveré a ver Amelie sentado en el sillón

mientras la lluvia ensucia las aceras y suena

de fondo y banda sonora el rumor de las gotas

golpeando la ventana.

Volveré a dejarme enamorar por el olor

a tierra mojada y el perfume de la hierba.

Sumiré al silencio en un limbo de dorados

sueños de la infancia, recuerdos del rojo

de las majoletas.

Volveré a recorrer sus calles húmedas

y me invadirá el olor del jabón artesano

y el aroma de la tienda del Té de la calle Ancha.

Volveré a probar las avellanas con la calma

del que sabe que siempre habrá un mañana,

veré campos dorados de calabazas

y árboles de membrillo…

Y saludaré a los almendros en esos días

en que sus frutos abandonan sus ramas

y besan el suelo.

Y al mirarme en el espejo veré

tus ojos en los míos porque vivirás en mí,

ya no quiero primaveras ni veranos,

no deseo más que el fuego de tus labios,

el calor de tus abrazos de invierno.

Y no volveré a olvidarte,

no dejaré que esta vez

me quede el otoño para septiembre.